Guía de Salud de la Mujer Deportista
Durante años, la ciencia del deporte se ha construido tomando como referencia cuerpos y patrones masculinos. Esto ha generado una brecha de conocimiento que afecta al rendimiento, la prevención y la salud de las deportistas. La menor presencia de mujeres en espacios de decisión científica y técnica también ha contribuido a perpetuar este modelo androcéntrico, dejando fuera aspectos esenciales como la fisiología hormonal, la salud menstrual, las etapas vitales o las diferencias biomecánicas que influyen en la práctica deportiva.
En la última década, la investigación ha avanzado de forma notable. Hoy sabemos que las variaciones hormonales, la disponibilidad energética, la salud ósea, el dolor menstrual, las disfunciones del suelo pélvico o cambios vitales como el embarazo y la menopausia influyen en la experiencia y la respuesta al entrenamiento. También sabemos que no existen dos ciclos, dos cuerpos o dos contextos iguales; por eso, la individualización es clave.
Este cambio de mirada coincide con un contexto deportivo en transformación, donde aumenta la demanda social de igualdad y la necesidad institucional de disponer de criterios comunes, accesibles y actualizados. La salud de las deportistas ya no se concibe como un aspecto aislado, sino como parte esencial del rendimiento, la prevención de lesiones y el bienestar integral.
En este escenario, una guía específica —rigurosa, clara y elaborada con perspectiva de género— es imprescindible para acompañar a las mujeres en todas sus etapas vitales y en todos los niveles deportivos. Su propósito es doble:
- Explicar de manera comprensible los procesos biológicos y fisiológicos que influyen en la salud de las deportistas.
- Ofrecer herramientas prácticas para integrarlos en el entrenamiento, la planificación, la prevención y la atención sanitaria.
Además, esta guía responde a un compromiso ético: garantizar el derecho de las deportistas a una práctica segura y equitativa. Incorporar criterios clínicos actualizados (RED-S, menstruación como signo vital, salud ósea, salud pélvica, etapas vitales…) permite mejorar la detección precoz, la prevención y la toma de decisiones técnicas y sanitarias.
También contribuye a superar barreras estructurales y a construir entornos deportivos más justos. Aunque su enfoque es amplio, esta guía se centra exclusivamente en las deportistas sin discapacidad. No es una ausencia, sino una decisión metodológica: abordar adecuadamente la intersección entre género y discapacidad requiere un documento propio y la participación directa de especialistas, entidades del ámbito paralímpico y de las propias deportistas.
El CSD considera necesaria esa guía complementaria para garantizar el derecho a la salud de todas las mujeres.
Por qué esta guía es necesaria:
- Brecha de evidencia científica.
- Especificidad fisiológica femenina.
- Estándares clínicos actualizados (RED-S).
- Coordinación interdisciplinar.
- Equidad y derecho a la salud deportiva.
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